Puente inmaculado

Días festivos alternos
que poco descanso dan
que poca licencia otorgan.

Puente que es acueducto.
Árbol instalado bajo la escalera
con luces augurando
navidades ilusionadas
con niño sonriente.

Días festivos alternos
jugando al no y al sí
sin condiciones a la carta
de reyes
mas alta
enviada antes de que se pierda
en el correo navideño.

Todo lo que quiero

Todo lo que añoro
es todo lo que olvido.
Todo lo que olvido
sé que es mucho...
no sé lo que.

Abre la puerta.
Si te pareces a la de la foto
será porque eres tú.
Rellena la solicitud
y no pierdas la esperanza.
Te veo preciosa esta mañana
y las diez siguientes.

Todo lo que tengo
es más de lo que quise.
Todo lo que quiero
lo amo tanto...
que no lo quiero perder.

Borrando borradores

Hay borradores que no borran lo sucedido
sino que dejan constancia en segundo plano
más allá de tiempos y estado de ánimo.

Tecnología al servicio del recuerdo
cuando lo más deseado es el olvido;
desea eliminar este documento?

Dudas innecesarias, que anotar al pie
de verso
de página
que nunca recordar.

Amistad #74

Que hay amigos que son un lujo
que da gusto rememorar viejos tiempos
convocar otros nuevos
y brindar por la siguiente ocasión
que coincidamos.

Cambios inesperados

Rupturas inexplicables que acaban sonando
cambios de planes sobre la marcha
miedo a esa soledad que ni traidora
ni agarrotadora
sólo soledad.

Ojalá conociera las respuestas correctas
pero aún no.

Son tantas las veces que las sinrazones
salen a la luz que acabas por acostumbrarte.
Cambios de sentido sin sentido
y señales de stop que nunca están
donde deberían.

Complicada sencillez
vuelta de tuerca
final que parece un principio.

Mala racha

Cuando todo se alía a la contra
como si hubiese una conspiración,
cuando todo es, poniendo tanto empeño,
en fin, cuestión de mala suerte.

Ni te llevas a la chica
ni ganas la quiniela
ni sale nada a derechas;
cuestión de suerte
que no acompaña
vuelta del revés.

Modo de ser/estar/parecer

Acaparar la atención
vomitivo
reiterar el chiste desgraciado
abofeteable
rumiar el desprecio con sonrisas
tan elegante.

Disimular el odio con sonrisas
falsamente
responder como si escuchase
educadamente
mandar al carajo a quien sea pertinente
tan harto.

Un tercio

Los poemas de hace tiempo
que se acumulan por libretas
casi abandonadas o poco visitadas.

Ya no escribo tanto
pero sigo escribiendo
más o menos
lo tanto de siempre
o 1/3 de todo aquello.

Los poemas de hace tiempo
que ahora no escribo ni a tiros
más allá del quinto verso.

Ya no escribo tanto
pero algunas veces
aún hilvano algún
intento de no olvidarme
de lo que digo.

Diseños sobre la marcha

Releer perspectivas años transcurridos
futuro sucedido por peteneras
ocurrencias de bombero
tomadas a coña hechas destino.
Obviar tópicos que se atan
al recuerdo como una lapa.
Rediseñar cariños
para dejar hueco
al exigente amor de crío.
¿Por qué esperar tanto
sólo por verlo sonreír,
reirse a carcajadas gorgoteantes?

Difícil de explicar,
sencillo de entender.
Ángulos cambiantes
luces y sombras
caleidoscópicas.

Años, perspectivas, planes cambiantes,
como siempre
sin lugar para el  arrepentimiento
ni remordimiento posible.

Falta de ejercicio

Hubo un tiempo
en el que las palabras surgían tan apretadas
que casi no me quedaba tiempo
para escribirlas
para sujetarlas
para buscar un verso más
ahora me he vuelto distraido
he perdido la costumbre
he bebido demasiado
he desgastado significados
he dejado de creer
en definitiva
me cuesta más que nunca
anotar
algo con cierto significado.

Sin final

No tengo un final para este principio, ni para el resto de los otros principios que no llevan a parte ninguna.

O a lo mejor no tengo ningún otro principio, ni de este ni de otro tipo, disponible.

Puntualidad cabal

Los trenes parados en estaciones vacías casi dando la medianoche,
el bostezo entre aburrido y dormido en una espera calmada,
el café inhóspito, a punto de cerrar entre tanquilo y con prisas,
la última hora que ni tan última que no se le puedan robar unos minutos,
la puntualidad respetuosa y cabal tan inusual por otro lado,
la resignación que no cambia el concepto de realidad tan propia,
la luna triste que se oculta y se niega a mostrarse,
la negación obligada a tener en cuenta más allá de toda duda,
la tontería que no se cura ni a la de tres,
la gente extravagante que se conoce algunas cenas y ni ganas de volverlas a ver...

Mapa del cerebro

Un pensamiento corre hacia otro pensamiento
y las ideas intentan no perderse
de un camino sin señal alguna.

Recuerdos atados a lugares
y músicas que sonaron de refilón.
No fueron como se recuerdan
pero eso no convierte en peor.

Digitalizando recuerdos

Fotografías de hace tanto,
textos que olvidé haber escrito,
ecografías que serán fotos bochornosas,
vídeos de boda que no son propia.

Pablo

Por dos veces escogido
y es que hay ideas que no
escapan de una cabeza llena de agujeros;
una vida nueva
responsabilidad propia y compartida
el terror/miedo dejado
para luego
y la seguridad en que saldremos adelante.

Las ganas de llorar contenidas
por quien debería estar
y se lo ha perdido
(sesé, Manolo, Isa... los abuelos
que ya harían bis)
y la certeza
de las risas que se iban a echar
a cuenta propia
y el cariño que iban a derrochar
a manos llenas.

Nada es tan complicado como parece
ni tan simple como asemeja;
nada que una dosis de valor
y tranquilidad no pueden sobrellevar
con la seguridad de ser uno mismo
y estar haciendo todo lo posible.

Por dos veces deseado
y con todas las esperanzas puestas
en el futuro
traidor y puñetero
encantador y mágico
de siempre.

La abuela 2

Dicese de la abuela que no es la que esta hablando contigo por telefono

Hechizo

Una palabra
mágica
que funcione como un hechizo
que nos traiga
justamente
a donde estamos.

Que no cambie nada
que no deba ser cambiado
que permanezca la alegría

Henar

Tan diminuta y tan guapa
con seis horas de vida
y todas las posibilidades
por delante.

Ojalá hubieras visto
la mirada de tu padre
al vigilar tu sueño,
el cansancio satisfecho y feliz
en los ojos de tu madre.

Espero que aspires a todo
linda, guapa, bonita.

No me llamas

No me llamas para cerciorarte
de que todavía te añoro
todas y cada una de las noches
de miércoles en que no oigo tu voz.

No me llamas para que te escriba
para poder leer, mañana por la mañana,
que todavia necesito tu voz
que me acune, todas y cada una
de mis noches.

Tonta antología de recuerdos

Como si pudiese contenerlos
todos en mi frágil cerebro,
juego a inventarme pasados
que no sucedieron como tú juras
que fue.
Como si pudiese recordar todo
lo que no pasó
como si hubiese pasado varias veces.

Pasados que no sucedieron
en modo alguno
como era de esperar
pero nos fueron trayendo
ante un futuro
con tantas opciones como siempre
y con pocas ganas de ser domesticado
o acostumbrado
a dios sabe que vacias
harturas;

Lo peor no es lo pasó
suele ser lo que pudo pasar
o lo que está por venir;
por que te pongas como te ponas
prevenir el futuro
no es moco de pavo
ni tan fácil
como pudiera parecer.

Y no hay imaginación que esté
a altura
semejante.

La sombra en la pared

La sombra en la pared,
el cinismo en la punta de la lengua,
el trabajo que no dignifica sólo cansa,
y la certeza
de que la tercera cerveza
traerá un comentario entre certero e inspirado

que dura es la vejez para los que aún
no estamos jubilados.

Es en estas tardes

Es en estas tardes
que no se parecen en nada
a otras tardes
cuando todo sale como puede
y no como uno desearía.

Y los tiempos que ni tan fugaces fueron
ni tantas oportunidades trajeron
como era de esperar.

Es en estas tardes
que no son tan distintnas
en las que las cosas
se precipitan de modos
inesperados
a lugares insospechados.

Y los tiempos agotan amistades
que es mejor dejar morir
como estaba cantado.

Besuqueo #6

A modo de prólogo:
Un caso de identidad errónea
con un no ditinguí su nombre
colgado de la bruma del alcohol

Fue un beso tierno
dulce
aderezado
con la sorpresa de lo inesperado
unos ojos juguetones
y con la sonrisa sorprendida al terminar
ni demasiado corto
ni demasiado largo.

Y el resto es historia
que es mejor olvidar
si alguien la pudiera recordar.

La mala leche como motor

El zumo de naranja tan ácido que salta una muerte inevitable,
el impertinente y como acusador que dan ganas de morder,
el cuarto de hora de retraso que aún se considera posible sin caer en la mala educación,
los zapatos despegados como bocas abiertas de tanto comer kilómetros,
los ríos recorridos a par de cauce,
las decisiones equivocadas que atan tiempos y vidas casi completas,
los amores que se jactan y son tan falsos como el primer te quiero,
la edad como excusa o aburrimiento o quién sabe qué de que,
las falsedades que se suponen como única razón de nunca fuiste tanto como asemejabas,
la seguridad de ver los agujeros que harán fracasar ese proyecto de supuesto matrimonio,
la cadena interminable que no es condena sino palabras eslabonadas,
el vaso sediento sin gota de agua fresca,
las terceras impresiones que casi siempre corroboran a la primera,
los preparativos innecesarios cuando hay pretensión de entendimiento,
las tardes de sábado que no salen a derechas ni como estaban planeadas,
la mala leche como motor de versos y besos que más parecen mordiscos,
los secretos insecretables cantados bajo la luna,
los trinos de pájaros que no cantan nada reconocible,
la tinta azul de calamar del tónico y revolucionario,
la agudeza proclive a irse por las nubes cirricas y estráticas,
el derrape que se pasa de la última carcajada,
el sueño que se come entera la mañana,
los arrepentimientos que dejar para otra ocasión.